Actúa para mí.

 Actúa para mí. 

Aquel día era como cualquier otro para la agrupación de cinco miembros, Sexy Zone, aunque era verdad que aquel día tenían un programa especial en una  cadena televisiva.

-Bien chicos, ahora nos dividiremos para buscar  esa pieza que nos falta y así ganaremos.- Decía Kikuchi a sus compañeros, pues tenían que buscar por toda la ciudad, a parte de pistas, piezas de un rompecabezas, el cual al juntar y armar les hacía acreedores de la victoria contra otros empleados más de la Johnny's Entertainment. -Yo iré con Marius.-

-¿Ehhhh? No, no, no, Marius es mío.- Dijo Fuuma molesto.

- Pero si yo no pertenezco a ninguno de ustedes, yo soy más de Sou-chan.- Dicho esto había abrazado al más bajo por la espalda.

-No, no, no. -Dijo el director de escena.- Ustedes dos están casi siempre juntos, necesitamos algo más novedoso.- Los reunió a los cinco para decirles como se dividirían y algunas cosas que quería hacer para aquel episodio.

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Se habían dividido en dos grupos: Marius, Fuma y Shori por un lado, dejando a los otros dos en un grupo a parte. Después de horas apareció la dichosa pieza que les faltaba, siendo esta encontrada por el mayor del grupo, el líder del mismo, Nakajima Kento.

-Felicidades, Kento, ahora por fin podremos pedir un trabajo solo nuestro grupo en una de las playas de América.- Decía su compañero de equipo de piel acanelada, ilusionado mientras miraba un poco de lejos a su superior.

-Gracias, Matsushima.- Lo miró por un momento, para luego hacer una pequeña gesticulación, mientras usaba sus ojos como herramienta para tratar de indicarle algo, haciendo que el menor ladeara un poco su cabeza, para después dar un pequeño sobresalto y sonreír de una manera tonta y animada, recordando  lo que les había dicho el director en un principio a ellos dos y sin más, Sou se acercó a su superior mientras aún le sonreía.

-Gracias por darnos ése éxito.- Dijo casi en un susurro, para después abrazar a Nakajima por el cuello mientras lo miraba a los ojos, para después cerrarlos y jalar suavemente al otro hacía él y así poder unir sus labios con los ajenos, a lo que el mayor respondió solamente cerrando sus ojos, para después abrazar por los hombros al menor, quien  no dudó en ladear su cabeza al lado contrarío para así besarle mejor.

Kento  dudó un poco, pero entreabrió un poco su boca para dejar salir su lengua y así poder lamer los labios del menor, quien se tensó por un momento antes de relajarse y dejarse llevar, sacando su propia lengua para unirla por unos instantes, mientras  abrían más sus bocas para seguir con aquel húmedo juego dentro de sus bocas. Ambos siguieron besándose por unos minutos más, hasta que se escuchó un grito estridente, el cual los hizo separarse, dejando un hilo de saliva entre sus bocas el cual fue cortado por la mano de Kento.

El dueño del grito que había separado a los otros dos, caminó hasta llegar hasta ellos y abrazó a Sou, alejándolo del todo  de Nakajima y gritó entre dolido y posesivo: -¡ES MI SOU-CHAN! - A lo cual hizo que todos rieran divertidos, todos menos el alemán, quien había sido el protagonista de aquella escena al tener a Matsushima entre sus brazos, y el  menor de los participantes de aquel acto que había estado siendo grabado por la cámara que  los había estado siguiendo todo el rato, la cual había hecho un enfoque bastante descarado en cuando empezaron a juntar sus lenguas, haciendo la toma más grande cuando se escuchó el grito, enfocando un poco a Marius, junto con el lazo de saliva que unía a los otros dos.

-Tranquilo Marius, tranquilo.- Intentó calmarlo el director de escena, quien estaba junto al cámara.- Yo hice que lo hicieran les dije todo lo que debían hacer, y salió mejor de lo esperado, ahora las amantes del BL los amarán aún más, aunque  tendremos que cortar un poco la escena para que no censuren nada.- Dijo orgulloso de su trabajo.

Sou se había sonrojado un poco por que Schmich lo apretaba mucho contra su cuerpo mientras sus manos estaban en su cadera para abrazarlo. -Mari... creo que sería bueno que quitaras tus manos de ahí.- Dijo en un susurro, pero el más alto solamente lo apretó más contra su cuerpo mientras sonreía.

-¿Incómodo? - Le susurró. Todos acabaron yéndose del lugar, pues habían terminado el trabajo de ese día e iban a sus respectivas casas, aunque los más pequeños del grupo, se acompañaron mutuamente a la estación de metro para irse a sus respectivas casas, el viaje fue silencioso hasta que el menor habló:

- Pensé que eras tímido hasta para hablar con mujeres, pero besaste muy obscenamente a Kento-kun.- Dijo entre pequeñas risas.

-Calla... Soy así con las chicas, con los chicos no, después de todo, yo también soy uno ¿No es así? Además, solo era actuación.- Dijo en su defensa, hasta que el más alto paró en seco y le sonrió.-

-Entonces, actúa igual conmigo, Matsushima.- Le había hablado por su apellido solo para demostrarle que iba enserio, recibiendo un chasqueo de la lengua del mayor.

-No seas crío Mari ¿Acaso estás celoso? - Dijo divertido antes de acercarse al menor y jalar al otro con fuerza para ponerlo a su altura y así besar los labios ajenos con fogosidad adentrando su lengua sin permiso alguno, hasta que sintieron muchas miradas sobre ambos y escucharon unos cuantos gritos de emoción. Se separaron y jadeaban un poco por la falta de aliento que tenían, y notaron con horror que no se equivocaban, al rededor suyo había tanto fanboys como fangirls estaban presentes en distintos lados mirando algunos sorprendidos, otros asqueados y muchos otros más, emocionados. -Creo que.... debemos irnos... Mari...- Susurró el más bajo a su compañero.

-Sí, eso creo....¿Corremos? - Cuchicheó suavemente  a lo que el mayor asintió.- Cuando contemos tres,  salimos corriendo.- Sugirió antes de comenzar la cuenta, seguida uno del otro,  hasta llegar al número acordado, saliendo los dos corriendo  a toda prisa por donde pudieron, dejando a sus fanáticos  del todo emocionados por al menos haberlos visto sin internar ocultarse, o al menos eso parecía.

Pasados algunos días tanto Julius como Matsushima fueron regañados por sus superiores, pero sus jefes, al final le dieron un premio por hacer el escándalo entre ellos, el cual les dejaba más dinero.

-Después de todo era actuación ¿no es así?- Preguntó Kikuchi a los menores, quieres simplemente se vieron entre ellos con algo de complicidad y simplemente sonrieron, diciendo un "sí, actuación" al unísono.
























FIN


                                                                                  






owo Feliz año nuevo <3